En un mundo donde todas las marcas parecen competir por ser las más llamativas, Khy decidió tomar otro camino: no compite… colabora. Desde que debutó en 2023, la marca de Kylie Jenner ha mostrado que su verdadero talento no está solo en diseñar ropa, sino en elegir con quién diseñarla. Khy mezcla la estética urbana y juvenil de Kylie con el estilo único de diseñadores emergentes, convirtiéndose en un espacio donde la moda se siente fresca y llena de experimentos creativos. Si algo domina el clan Kardashian, es encontrar talento y convertirlo en fenómeno global, y Kylie aplicó esa misma fórmula con Khy desde el primer día.

El sistema de Khy es bastante simple pero efectivo: en lugar de depender solo de sus propias colecciones, se asocia con marcas y diseñadores emergentes para darles visibilidad internacional y generar un hype inmediato. Así han trabajado con nombres como Namilia, Entire Studios, Natasha Zinko, Ioannes, Dilara Findikoglu, Poster Girl, ATLEIN, Frankies Bikinis, GRACE LING y Sia Arnika. Cada uno aporta su propia estética y visión, mientras Khy actúa como plataforma para que estas marcas lleguen a un público más amplio. Es un estilo de negocio que hace que cada colección se sienta única y con personalidad propia.

Lo más llamativo de este enfoque es cómo convierte cada colaboración en algo más que ropa: es una historia, un universo creativo que llama la atención. Las marcas emergentes ganan visibilidad casi instantánea y Khy se posiciona como un lugar donde la innovación manda. En la era de las redes sociales, estas alianzas inteligentes pueden ser incluso más poderosas que cualquier colección propia. Cada lanzamiento es un recordatorio de que a veces no se trata solo de competir por atención, sino de saber rodearte de la gente correcta y dejar que todos brillen juntos.