Con tantas colecciones y semanas de la moda, entender el mundo de la moda puede ser un reto. Haute couture, ready-to-wear, resort… las casas de moda presentan propuestas constantemente, cada una con sus propias características y propósitos. Para aclarar conceptos básicos, comenzamos con uno de los términos más exclusivos y admirados del sector: la alta costura.

La alta costura, o haute couture, es la cúspide de la moda, una forma de arte que combina diseño, técnica y exclusividad. El término, protegido por la Cámara Sindical de Alta Costura de París, se refiere a creaciones hechas a medida, elaboradas artesanalmente con los materiales más exquisitos y técnicas impecables. Para que una casa de moda pueda llamarse haute couture, debe cumplir estrictos criterios, como tener un taller en París con un número mínimo de artesanos y presentar dos colecciones al año con un cierto número de piezas, según las reglas de la Chambre Syndicale de la Haute Couture.

A diferencia de las colecciones de ready-to-wear o prêt-à-porter, diseñadas para ser producidas en serie, la alta costura es completamente personalizada, pensada para un cliente específico. Los desfiles de alta costura no solo exhiben moda, sino también visiones artísticas que desafían los límites de la creatividad y la técnica. Cada prenda es una obra de arte, con cientos de horas de trabajo detrás, justificando su exclusividad y alto precio.

Entre las casas de moda más destacadas de alta costura se encuentran Chanel, Dior, Schiaparelli y Valentino, quienes año tras año deslumbran con sus colecciones en la Semana de la Moda de Alta Costura de París, que actualmente se celebra su edición 2025. Además, diseñadores contemporáneos como Iris van Herpen han revolucionado el concepto, incorporando tecnología y sostenibilidad sin perder la esencia artesanal de la alta costura.

Cuando lo rápido y masivo domina la industria, la alta costura se mantiene como un recordatorio de la esencia de la moda: creatividad, dedicación y el poder de contar historias a través de la ropa. Entender la alta costura es abrir una puerta a la esencia más profunda de la moda, donde cada detalle es una celebración de lo único y extraordinario.