A pesar de anunciar su retiro de las pasarelas en mayo de este año, Bella Hadid continúa siendo una de las mayores influencias dentro de la moda. Ya sea en las calles o alfombras rojas, la ex modelo ha demostrado tener un ojo impecable para las tendencias y una habilidad única para mezclar elementos vintage con toques modernos.

Al comienzo de su carrera, Bella apostaba por un estilo más refinado y sofisticado. Vestidos largos con cortes elegantes, colores neutros y siluetas ceñidas al cuerpo eran su firma. Inspirándose en los looks de supermodelos de los 90 como Cindy Crawford, su enfoque minimalista capturó rápidamente la atención de la industria. Pero donde Bella realmente brillaba era en su street style, eso fue lo que la consolidó como una trendsetter. Con una preferencia por prendas oversize, conjuntos monocromáticos y toques de los años 2000, como pantalones cargo y gafas de sol de montura delgada, su estilo diario mezcla sin esfuerzo comodidad y audacia. Bella ha revivido la moda Y2K con un toque fresco y contemporáneo, logrando hacer que piezas que alguna vez se consideraron pasadas de moda se sientan innovadoras y deseables nuevamente.

En la alfombra roja, no le da miedo tomar riesgos. Sus elecciones incluyen vestidos estructurados, cortes audaces y detalles que capturan la atención. Un momento icónico fue su aparición en Cannes 2021, donde lució un impresionante vestido negro de Schiaparelli con un escote profundo adornado por un collar en forma de árbol bronquial dorado. Este look se consagró como uno de los más icónicos del año y quedó grabado en la memoria colectiva como uno de los vestidos más memorables en la historia de la alfombra roja.

Pero Bella no solo marca tendencias con su vestimenta. Su enfoque en la belleza también ha tenido una tremenda influencia, al popularizar looks como las cejas delgadas al estilo de los 90 y el maquillaje natural con una piel dewy. A pesar de llevar años en la industria, Bella Hadid sigue siendo un referente indiscutible para quienes buscan inspiración en la moda. Su capacidad para reinventarse año a año es un espectáculo que nadie quiere perderse.