Viaja a unos 20 años atrás, cuando los príncipes William y Harry eran adolescentes, se llevaban bien y jugaban polo. Después de los partidos, desde los pómulos y hasta la línea de la mandíbula, la piel de los príncipes tenía un intenso tono rosado que destacaba en sus rostros. Esa es exactamente la imagen que la tendencia “boyfriend blush” quiere replicar.

 

 

No hay duda de que estamos en la época dorada del rubor. En el último tiempo, el blush se ha convertido en uno de los elementos más esenciales de cualquier rutina de maquillaje. De su reciente popularidad han nacido diferentes tendencias para jugar con este producto. El “boyfriend blush”, tal como se traduce, busca recrear el efecto del enrojecimiento natural en la piel clara de un hombre tras hacer deporte. Lo que distingue a esta técnica es que el rubor se aplica en una zona mucho más baja del rostro, desafiando las tendencias de maquillaje con efecto lifting que predominan en las redes sociales.

 

 

Al imitar la forma en que la piel reacciona ante el calor, el “boyfriend blush” permite entregar color a la piel de manera natural y brindar un aspecto más juvenil. Generalmente, se utilizan rubores en crema para tener un acabado más glowy. Con el hashtag #boyfriendblush puedes encontrar tanto en TikTok como en Instagram diferentes tutoriales para recrearlo.

 

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